Science ha publicado una lista sobre los diez descubrimientos de la década, hemos creído que podría ser interesante para los asiduos lectores ver dichos descubrimientos. A continuación adjuntamos la lista publicada por la prestigiosa revista:
El lado oscuro del genoma
Hasta que se publicó por primera vez el genoma humano, las cosas parecían claras: el ADN era el encargado de indicar al cuerpo cómo construir las proteínas y las instrucciones estaban escritas en los genes. Entre estos, había secuencias del genoma que no codificaban nada, a las que se bautizó como "ADN basura". La ciencia se encargó en esta década de dar la vuelta a este concepto y el ADN basura resultó no serlo y tener, sin embargo, un papel destacado en muchos procesos biológicos, incluyendo enfermedades como el cáncer. Al final, lo cierto es que parte de este tipo de ADN sí codifica proteínas y se puede utilizar, de hecho, para cerrar genes defectuosos.
La receta del universo
Los científicos ya tienen en su recetario los ingredientes para cocinar un universo. Según los últimos cálculos, hace falta una pizca de materia, como estrellas y planetas, que supone el 4,5% del universo; una buena cantidad de la misteriosa materia oscura, cuya gravedad sostiene las galaxias, y que suma el 22,7%; y grandes cantidades de energía oscura, hasta el 72,8%, y que sirve para acelerar la expansión del universo. Estos ingredientes se conocían en el siglo XX, y las pruebas de la existencia de la energía oscura datan de 1998, pero en los últimos años se ha podido concretar una teoría rigurosa de la formación del universo y un relato ajustado de su origen.
El tiempo viaja en ADN
Las herramientas para explorar el genoma humano han permitido que se desarrollara un nuevo campo de investigación de la vida prehistórica, el del ADN fósil. Y todo gracias a estas pequeñas máquinas del tiempo, las biomoléculas que sobrevivieron durante miles de años, que permiten conocer el genoma del neandertal, un trabajo completado este mismo año. Con la paleogenética se ha llegado a saber que buena parte de los neandertales eran pelirrojos de piel clara, pero también importantes detalles sobre relaciones familiares de especies ya extinguidas, como la cercanía de los dinosaurios a los pájaros actuales, mucho mayor que a los reptiles.
Hielo marciano
El 31 de julio de 2008, la NASA confirmaba la existencia de restos de hielo en las muestras del suelo marciano obtenidas por la sonda Phoenix. Se trata de una de las muchas evidencias de agua en el planeta rojo recabadas durante la última década, gracias a las misiones que se han realizado para explorarlo, como la sonda
Pathfinder o la Odyssey. Aunque en mucha menor proporción que en la Tierra, existen grandes cantidades de agua helada en glaciares y casquetes polares, aunque también existe agua en estado gaseoso en la atmósfera en proporciones ínfimas. La capa de hielo perpetuo del norte del planeta comprende unos 1.000 kilómetros de diámetro.
Pathfinder o la Odyssey. Aunque en mucha menor proporción que en la Tierra, existen grandes cantidades de agua helada en glaciares y casquetes polares, aunque también existe agua en estado gaseoso en la atmósfera en proporciones ínfimas. La capa de hielo perpetuo del norte del planeta comprende unos 1.000 kilómetros de diámetro.
Células que se reescriben
Las células adultas capaces de reprogramarse no sólo es uno de los hallazgos de esta década sino que, seguramente, de este hecho se deriven grandes avances en un futuro cercano. El hito que logró el investigador japonés Shinya Yamanaka en 2006 desafiaba una creencia inamovible de la biología: que en el camino de desarrollo de un embrión, una vez que una célula se diferencia no puede volver atrás para convertirse en otro tipo de célula. Sin embargo, Yamanaka demostró que al añadir copias extra de cuatro genes a células adultas de ratón, estas pasaban a ser pluripotenciales. El hito se ha reproducido varias veces en células humanas.
Los amigos microbios
Esta década se recordará como el momento en que los microbios dejaron de ser enemigos de la humanidad para reconocerse como parte fundamental del organismo. Desde que el Nobel Joshua Lederberg abogó en el año 2000 en Science por el fin de la filosofía "nosotros somos el bien; ellos el mal", ha habido muchos avances en torno al microbioma, la ciencia que estudia cómo conviven en el cuerpo bacterias, virus y microbios. Desde entonces, se ha descubierto que los microbios afectan a la energía que absorbe el cuerpo y que algunas bacterias protegen frente a enfermedades, entre otros hallazgos.
Nuevos mundos
En este momento, se cuenta con un catálogo de 510 exoplanetas confirmados -planetas que orbitan en torno a estrellas distintas al Sol- en 422 sistemas planetarios distintos. Aunque el primer exoplaneta se halló en 1992, ha sido durante esta década cuando su registro se ha disparado, hasta el punto que se han creado aplicaciones de iPhone que informan de nuevos descubrimientos. La gran cantidad de ejemplos permite realizar un retrato más ajustado de las características que definen a estos mundos ajenos al Sistema Solar, en su mayoría gigantes de gas, aunque también abundan pequeñas Tierras.
Inflamación enemiga
Hasta hace relativamente poco tiempo, con la inflamación pasaba como con la fiebre: se pensaba que era una reacción del organismo para defenderse de agresiones. Algo, por lo tanto, positivo. Pero las cosas empezaron a cambiar cuando, a finales de la década de 1980, investigadores de la Universidad de Washington observaron macrófagos (células del sistema inmune, típicas de la inflamación) en tejido aterosclerótico. Desde entonces, todo fueron descubrimientos negativos, habiéndose demostrado en esta década la relación de la inflamación con el alzhéimer, el cáncer, la diabetes y la obesidad.
Materiales invisibles
La posibilidad de manipular la materia a niveles nanométricos (un millón de veces menor que un milímetro) podría generar lentes mucho más potentes que las que usan los microscopios actuales o generar capas de invisibilidad. Si esto llega a ser posible, será gracias a los metamateriales, hechos de bastones o anillos diminutos cuya disposición puede conducir o reflejar la luz de formas inusitadas. Estos materiales podrían usarse para crear superlentes capaces de concentrar diez veces más luz que una lente convencional o de reflejarla de forma que hagan invisible el objeto que cubren.
Camino del desastre
Durante esta década, la idea del calentamiento del planeta -de carácter antropogénico, por la emisión a la atmósfera de gases de efecto invernadero- se ha consolidado entre la comunidad científica (hasta un 97%, según datos oficiales), un consenso que llegó en 2007, cuando el panel de científicos de la ONU aseguró que era "inequívoco". Pero, resalta Science, a pesar de evidencias como el derretimiento de los glaciares o la acidificación de los mares, es una verdad científica que se ha encontrado de frente con la política, que no está asumiendo su papel para contrarrestarlo.
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